1 de septiembre de 2015

CARTA DE SANTIAGO RAMÓN Y CAJAL AL AYUNTAMIENTO DE MONFORTE DEL CID



Santiago Ramón y Cajal, como muchos conocerán, es uno de nuestros científicos más universales. Doctor en Medicina, especializado en Anatomía Patológica e Histología, logró cátedra en varias universidades españolas, una  labor científica que culminaría con la concesión del Premio Nóbel de Fisiología y Medicina en 1906. También destacar que en el año 1922, año de su jubilación, se funda en Madrid el “Instituto Cajal”, donde prolongará su actividad investigadora hasta su muerte en 1934.
En la Sesión de pleno del Ayuntamiento de Monforte del Cid de 6 de abril de 1922 se acordó poner el nombre Ramón y Cajal a la anteriormente conocida como calle Mayor. La propuesta partió de Pascual Richart y se solicitó que el cambio se hiciera coincidir con la fecha de jubilación de la enseñanza del sabio, que tendría lugar en el mes de mayo de 1922. Pascual Richart fue un médico originario de Monforte que pasó parte de su vida en las Islas Canarias[1], retornando a su ciudad natal en 1907, alcanzando el nombramiento de médico titular de Monforte del Cid en 1914. Curiosamente también existe una calle dedicada a este doctor monfortino en nuestro municipio.

Tras el renombramiento de la “Calle Mayor” como “Calle de Ramón y Cajal”, el 6 de junio de 1922 fue recibida una carta por el Alcalde del Ayuntamiento de Monforte del Cid. El documento, con membrete del “Instituto Cajal” de Madrid, iba firmado por el ilustre científico, y en él agradecía y expresaba su enorme satisfacción ante la distinción con su nombre de una calle de nuestro municipio.

Este documento resulta de gran importancia dada la relevancia de unos de los científicos españoles más importantes de todos los tiempos, al que el pueblo de Monforte quiso rendirle un homenaje permanente, dando el nombre de “Ramón y Cajal” a una las calles más emblemáticas de nuestra población, y como el universal doctor no dudo en expresar su satisfacción por este reconocimiento.
La carta de agradecimiento de Santiago Ramón y Cajal al pueblo de Monforte es sin duda otra pequeña joya documental que viene a incrementar aun más nuestro rico patrimonio documental.



[1]Sánchez Valerón, Rafael: “Monfortinos en Gran Canaria”. Revista de Fiestas de Moros y Cristianos de Monforte del Cid. 2011.

2 de febrero de 2015

CONFERENCIA: “DE LA RAMBLA AL CID: EN TORNO A LOS NOMBRE DE MONFORTE”



En el 2015 se va a iniciar desde la Concejalía de Cultura del Ayuntamiento de Monforte del Cid un ciclo de conferencias que nos llevarán por distintos aspectos etnográficos e históricos de nuestro municipio. Distintos profesionales especialistas en diversas materias nos acercarán un poco más a nuestro Patrimonio.


El próximo 5 de febrero en la Sala Ibamir de la Biblioteca Municipal, y como primera conferencia del ciclo “Descubriendo nuestra Historia”, tendrá lugar una ponencia impartida por el profesor Carmel Navarro Belmonte. Licenciado en Geografía e Historia, es profesor de Educación Secundaria y Doctor en Filología por la Universidad de Alicante. Cuenta con numerosas publicaciones en el ámbito de la Historia y la Filología, destacando las realizadas en relación al estudio onomástico y toponímico del valle del Vinalopó.

27 de octubre de 2014

LA "PILOTA VALENCIANA" EN MONFORTE DEL CID


El 5 de septiembre de 2014, fue declarada Bien de interés Cultural Inmaterial la pilota valenciana, una tradición inmemorial vinculada a todo el territorio valenciano y a la que nuestro municipio no ha sido ajena.
Símbolo de la identidad en nuestro territorio, se remonta su origen a época grecorromana, estando fuertemente arraigada en la región valenciana en el s. XIV, y perdurando esta tradición en la actualidad a diferencia del resto del territorio español, donde a excepción del País Vasco, Navarra y Comunidad Valenciana, el juego de pelota terminó desapareciendo a lo largo del s. XIX.
En Monforte son mucho los que recuerdan y han sido partícipes del juego de pelota, practicado en días festivos o fin de semana envuelto de una gran afición. Uno de los rasgos más singulares de la pelota valenciana son la existencia de distintas modalidades de juego, siendo dos las más practicadas en nuestro pueblo: a “largas”, que se jugaba en la calle de los Toros, Calle de Elche y del Calvario; y a “percha” practicada en la Calle Casto Richart.
Dada la gran afición a la pelota y el hecho de que se practicara en la calle, se hacía necesaria la regulación del tradicional juego por parte del ayuntamiento. Así, en la documentación del archivo municipal se recoge una ordenanza aprobada en el pleno de 19 de enero de 1873, donde se regulan las partidas de pelota y otros asuntos de orden público. En la mencionada ordenanza se recogía que las partidas estaban condicionadas al consentimiento de los vecinos de la calle donde se jugara y a la concesión de permisos por parte de la autoridad municipal, que establecía los horarios y daba orden de retirar las farolas del alumbrado, dado el peligro de romperse, imponiéndose multas ante posibles desperfectos.

Hoy en día son otros lo deportes que imperan en el ocio deportivo monfortino y a lo largo del s. XX la pelota fue cediendo terreno aunque sin llegar a desaparecer. Pero ante el importante reconocimiento concedido a la pilota valenciana, no podíamos dejar pasar la oportunidad de dar a conocer el arraigo de dicha tradición en Monforte, de la que una vez más los “papeles” del archivo municipal se hacen eco y dejan constancia material de nuestras costumbres.












9 de julio de 2014

NUEVA DONACIÓN AL ARCHIVO MUNICIPAL DE MONFORTE DEL CID: EL CINE IBAMIR



El pasado mes de junio fue donada por la familia Miralles Berenguer la documentación del antiguo Cine Ibamir, concretamente la correspondiente a los años comprendidos entre 1957 y 1978. Este fondo recoge documentos del cine por excelencia de nuestro municipio, aunque no el primero, ya que también hubo sala de proyecciones cinematográficas en el antiguo Casino (ubicado al lado del ayuntamiento). Entre los documentos donados tenemos libros registro de las películas proyectadas con la recaudación diaria; hojas archivables con la información de todas las proyecciones que se realizaron en el antiguo cine ordenadas por año, recibos y el proyecto de obras de la sala. Este cine vio la luz gracias a la iniciativa empresarial de dos socios: Eleuterio Miralles y Manuel Ibarra, de ahí el nombre IBAMIR. 

Pero no solo ha sido entregado el fondo del antiguo cine, también un libro registro de su predecesor, el cine-casino, que tras la guerra, hacia el año 1945, fue adquirido por cuatro socios: Joaquín Miralles, Vicente Miralles, Miguel Sala Marco y Eleuterio Miralles, este último socio-fundador del Cine Ibamir. También han sido incorporados dos libros contables pertenecientes a dos carnicerías de Monforte del año 1926, una a nombre de José Miralles Martínez y la otra de María Escalante Sirvent. 
Destacar también la donación de documentación de quintas perteneciente a Ramón Mirambell Limiñana, así como el suplemento original del periódico El Día del año 1935 que fue dedicado a Monforte del Cid y del que se editó, en décadas posteriores, un facsímil como suplemento de la Revista de Fiestas de Moros y Cristianos. Y por último dos folletos, uno de las Fiestas de Moros y Cristianos de 1965 y otro de la Cofradía de Señoras y Caballeros y la Congregación de Hijas de María, con el horario de los cultos a la Inmaculada durante las fiestas de diciembre del año 1951.


Es indudable el valor del fondo documental donado, pues nos muestra la evolución de comercios familiares monfortinos que hablan de la historia empresarial de nuestro municipio, unos documentos vitales de cara a la investigación etnográfica y social sobre Monforte del Cid.











13 de junio de 2014

JORNADA DE PUERTAS ABIERTAS DEL ARCHIVO HISTÓRICO MUNICIPAL DE MONFORTE DEL CID



Con motivo de la celebración el 9 de junio del Día Internacional de los archivos, hemos celebrado unas Jornadas de puertas abiertas en las dependencias del archivo histórico municipal. A través de distintos aspectos característicos del archivo, realizamos una exposición guiada en la sala de investigadores. Mostramos la organización del archivo, el depósito, los soportes y documentos restaurados; explicamos cómo se elaboran los árboles genealógicos y los medios de difusión del patrimonio documental: las exposiciones, los libros y artículos de investigación histórica entre otros. También acercamos la historia de Monforte del Cid a través de una pequeña muestra de documentos que reflejaban acontecimientos históricos por todos los monfortinos conocidos. Por último, presentamos las donaciones y cesiones realizadas por vecinos del pueblo que han enriquecido enormemente los fondos del archivo, destacando la reciente donación de la correspondencia mantenida por el dramaturgo monfortino Fernando Martínez Beltrán con la famosa actriz de los 50 Ana Mariscal.
La respuesta ciudadana ha sido inmejorable. Recibimos la visita de 6º de Primaria del Colegio Jorge Juan, así como de un grupo de mujeres de la EPA municipal. Y ha sido tal la acogida que tuvimos que ampliar la exposición un día más. Esta gran aceptación nos anima a organizar desde el archivo más muestras de este tipo, que acerquen la Historia de Monforte al ciudadano.
Desde el Archivo municipal seguiremos en nuestro empeño de difundir nuestros fondos y poner en valor nuestro rico patrimonio documental.
¡¡Gracias a todos!!

7 de abril de 2014

UNA NOBILIARIA PETICIÓN DE VECINDAD A LA VILLA DE MONFORTE



El pasado mes de marzo fue presentada en el museo Íbero una pieza única de nuestro archivo, un expediente de petición de vecindad recogido en la mano de cabildos de los años 1764 y 1765[1].
En el cabildo de 18 de enero de 1765, Don Mariano Reig presenta memorial en el ayuntamiento solicitando sea admitido por vecino, ya que posee hacienda y casa en la villa. Es ampliamente conocido por todos la condición de realengo de Monforte y lo que eso suponía para los ciudadanos del municipio (a todos nos viene a la cabeza el caso de Jorge Juan y el famoso expediente de limpieza de sangre). En el caso que nos ocupa así se expresa en el cabildo ante el que se presenta la petición, pues el señor Reig, con la condición de vecino de Monforte, pretende gozar de la exenciones y privilegios que el mencionado estatutos le conferiría. Para ello aporta un memorial y la ejecutoria de su Hidalguía.






A continuación se presenta el mencionado memorial que recoge certificado de su bautismo (nacido en Albatera en el año 1730) y la ejecutoria de su hidalguía, documento público de reconocimiento de la condición de hidalgo. En dicha ejecutoria se recoge el escudo de armas y la declaración del privilegio de hidalguía obtenida por concesión real a sus antecesores.
 Si bien el expediente en sí aporta datos valiosísimos en relación a este tipo de documentos y al apellido Reig, también es muy destacable el impecable estado de conservación del escudo de armas que recoge.  




Destaca también la cuidada descripción heráldica que se realiza del escudo de armas y que a continuación pasamos a transcribir en parte:
Escudo escarcelado: el primero en gules nueve panelas de oro; el segundo mar de plata agisado de Bleu con un pez al natural puesto en fasa; el tercero vandado de plata y gules; y el último en la parte superior sobre plata paloma silvestre andante al natural con pico, y pies de gules…” .



La documentación histórica del archivo municipal es enormemente valiosa, pero en parte gracias a la perdurabilidad de los materiales utilizados (soportes, instrumentos de escritura, tintas, etc.) y a los medios de conservación de los que ha sido objeto a lo largo de los años. Sin ellos, muchos de los documentos que hoy conocemos no habrían llegado hasta nuestros días y parte del conocimiento de nuestra Historia se habría perdido.






[1] AMMC Mano de cabildos celebrados por la universidad de Monforte, 1764-1765, leg. 625/6

15 de noviembre de 2013

MONFORTE DEL CID: LUGAR DE PASO INMEMORIAL

Si una característica geográfica ha marcado la evolución histórica de Monforte es su ubicación. Su privilegiada situación en el valle del Vinalopó, histórico corredor de comunicaciones que enlaza la costa mediterránea con la meseta castellana, ha marcado su antigüedad, dato comprobable por medio de los numerosas restos arqueológicos de civilizaciones antiguas hallados en su término.  
Dada esa ubicación privilegiada, Monforte ha sido un pueblo permanentemente comunicado, y por el que han pasado y siguen pasando las principales vías de tránsito de la provincia con respecto a la zona castellana o el sur de la península. En la actualidad acoge en su amplio término la autopista AP-7, la autovía de Alicante o A-31, que desemboca en la capital provincial, uniendo a Monforte con la ciudad de Alicante en pocos minutos, y la del Mediterráneo o A-7 que da acceso al aeropuerto. Pero también contamos con kilómetros del trazado de una de las principales vías férreas de comunicación con Madrid, con la reciente incorporación de la línea de alta velocidad.  
Todas estas comunicaciones que hacen de Monforte punto de referencia geográfica, no son nuevas. Quien no recuerda la antigua carretera nacional 330 (CN-330), de la que aun se conserva algún hito kilométrico, y que atravesaba todo el municipio manteniendo hoy en día parte de su trazado. Y sobre todo el ferrocarril, inaugurada la línea de conexión con Alicante en su último tramo en mayo de 1858 y del que Monforte fue partícipe, una lugar lleno de historia por las personalidades que ha acogido en determinados momentos de su ya larga trayectoria. En este sentido cabe destacar la presencia de la reina Isabel II y todo el séquito real en el viaje inaugural. En ese viaje también iba el escritor alicantino Juan Vila y Blanco, que hizo una crónica del viaje en la que aparece Monforte y donde describe el recibimiento a la familia real por parte de la población, con la corporación municipal al frente. Fueron recibidos con un arco triunfal que también recoge la documentación municipal, en los presupuesto de 1858[1].


El ferrocarril contará con apeadero en Monforte hasta su conversión en estación hacia el año 1894, la denominada Estación Monforte-Gabarrera; posteriormente, a la inicial estación de viajeros, se uniría su uso como estación de embarque y desembarque de mercancías, junto con la construcción de una instalación telegráfica, dada la importancia del industria del vino en nuestro municipio y el movimiento comercial con el extranjero. 
 A lo largo del tiempo, la centenaria estación ha seguido viendo pasar a viajeros y personalidades, como el rey Alfonso XIII que la visitó en dos ocasiones, una en 1905 y otra en marzo de 1912, precisamente durante los prolegómenos de la celebración del II Centenario del nacimiento de Jorge Juan, donde le fue mostrada la famosa partida bautismal. En la actualidad, la vieja estación, ya "sin pasajeros", ha sido incluida dentro del catálogo de bienes y espacios protegidos dado su valor histórico y arquitectónico.



Y no quisiera concluir sin hacer mención de dos “caminos” culturales que incluyen a Monforte del Cid en sus itinerarios: el Camino de Santiago desde Alicante o también llamado Camino del Sureste, cuya primera etapa concluye en Orito, y el Camino del Cid, que recoge las huellas de Rodrigo Díaz de Vivar a través del Canta del mío Cid. Sendos caminos ubican a Monforte en el trazado de dos rutas, que sin tener un arraigo histórico, ya que parten del presente, se están consolidando como itinerarios turísticos-culturales de gran interés y seguimiento.
 


[1] AMMC Presupuestos 1958, leg. 500