14 de julio de 2011

DOCUMENTOS DE LA VILLA: LA HUELLA DEL PASADO 2


REPARACIÓN DEL AZUD



Dado el origen del nombre y de este tipo de infraestructuras hidráulicas, la construcción del Azud fue realizada bajo dominio árabe. En su origen su construcción se produjo para embalsar el agua del río Vinalopó, aprovechando también así las crecidas por las lluvias y facilitar el riego de las tierras de la zona de la Huerta.
El agua para riego se obtenía principalmente del río Vinalopó, donde se localiza la presa del Azud. Esta construcción beneficiaba el riego de las zonas agrícolas del Monforte pero iba en detrimento de otras poblaciones que se encontraban en el curso del río, lo que provocó algunas protestas.
Dada la importancia de la presa para el riego, a finales del s. XVIII, el Cabildo de Monforte, haciéndose eco de las quejas de los afectados por el lamentable estado del Azud, decide iniciar los trámites para su limpieza y reparación. Así se origina un expediente en relación al mismo. Se pretende proceder a una limpia y reparo provisionales, ya que las reparaciones definitivas requieren de la tramitación de un expediente en la capital del Reino de Valencia. En este sentido debemos indicar que hace unos años se descubrió una acequia árabe con sus tres boqueras, donde en una de ellas se evidencia las reparaciones de las que se hace eco la documentación encontrada en el Archivo Histórico Municipal. La imagen adjunta muestra el cabildo celebrado en la villa de Monforte el 28 de febrero de 1798 y que recoge la necesidad de las reparaciones indicadas así como de las gestiones a realizar para su ejecución. Dada la importancia de la obra a ejecutar, varios de los cabildos de aquella época recogen el asunto entorno a la reparación del Azud, lo que da idea de su importancia.

A continuación se expone un resumen del contenido del documento mostrado: La presa o "Asud" recoge las aguas del cauce o rambla llamada de Novelda, situada en el mojón divisorio de ambas villas, sin cuya boquera perderían el riego de las tierras del partido del Secano y Huerta. Su estado es deplorable y se insta a repararla. Se trata el tema del gasto y de la obra, con diligencia del cura, el cual ofrece caudales para cubrir los gastos urgentes para el reparo de la presa de manera provisional, ya que su reparación total requiere de trámites que alargarían su ejecución, provocando mayores perjuicios.
También se acuerda convocar al arquitecto de nacionalidad italiana y director de las obras que se están ejecutando en la Iglesia, para que inspeccione el estado de la presa o "Asud", y exponga mediante la elaboración de un plano y una declaración jurada, los reparos que necesita para su conservación, para que luego proceda a su reparación.